Esta historia se centra en la fe, la esperanza y el poder de Dios aun sobre la muerte, destacando la importancia de confiar en Él incluso en las circunstancias más desesperadas.
Dios tiene poder para transformar situaciones imposibles, enseñándonos que la fe perseverante puede vencer el miedo y la desesperación.
Cuando informan a Jairo sobre la muerte de su hija, lo invitan a la rendición y a la resignación por la pérdida. Pero Jesús, en ese momento, le dice: “No temas; cree solamente”. Es decir: no temas, no te cuestiones, no razones; cree solamente que el poder de Dios es ilimitado. Para Él nada es imposible.
No se trata de que Dios hará lo que pensamos que es lo mejor; Él hará lo que sabe que es lo mejor, y siempre en Su tiempo, no en el nuestro.
Jesús siempre llega a tiempo. Resucitó a la niña mediante la Palabra de Su poder y le dijo: “¡Talita Cumi!”
¡Niña, a ti te digo, levántate!