La administración Trump ha extendido sus ataques federales contra ciudades gobernadas por demócratas a Charlotte, Carolina del Norte, donde agentes arrestaron a más de 80 personas. El gobernador Josh Stein declaró: "Hemos visto agentes enmascarados y fuertemente armados, vestidos con atuendos paramilitares, conduciendo autos sin identificación, atacando a ciudadanos estadounidenses por el color de su piel, realizando perfiles raciales y deteniendo a personas sin razón en estacionamientos y en nuestras banquetas". Aunque la ciudad ha experimentado una reducción del 20% en los delitos violentos durante el último año, Charlotte es blanco de la administración Trump debido a su numerosa población inmigrante y a que su gobernador es demócrata. También es probable que Charlotte haya sido atacada debido al asesinato de Iryna Zarutska, una inmigrante ucraniana de 23 años que fue asesinada por un hombre afroamericano sin hogar en el metro. Debido a los antecedentes de las personas involucradas, el incidente se convirtió en una herramienta de propaganda para la derecha. El presidente Trump se refirió al asesino como un animal que debería recibir la pena de muerte, y se refirió a Zarutska como una "hermosa joven que vino a Estados Unidos buscando paz y seguridad".
The Trump administration has expanded its federal attacks on Democrat-led cities to Charlotte, North Carolina, where agents arrested over 80 people. Governor Josh Stein said, "We've seen masked, heavily armed agents in paramilitary garb driving unmarked cars, targeting American citizens based on their skin color, racially profiling and picking up random people in parking lots and off of our sidewalks." Although the city has seen a 20% reduction in violent crime in the past year, Charlotte was targeted by the Trump administration due to its large immigrant population and democratic governor. It's also likely that Charlotte was targeted due to the killing of Iryna Zarutska, a 23-year old Ukrainian immigrant who was killed by a homeless black man on a subway. Due to the backgrounds of the people involved, the incident became a propaganda tool for the far right. President Trump referred to the killer as an animal who should get the death penalty, and referred to Zarutska as a "beautiful young lady who came to America searching for peace and safety."