De adolescente, Wayne Nance desarrolló un interés por el satanismo que puede haberle llevado a cometer su primer asesinato. Se obsesionó con la idea de hacer un sacrificio humano - y en la primavera de 1974, se jactó con un amigo: "Ya está hecho".
Learn more about your ad choices. Visit podcastchoices.com/adchoices