El 27 de abril de 2013, en la localidad onubense de Almonte, un padre y su hija —Miguel Ángel Domínguez y la pequeña María, de 8 años— fueron encontrados sin vida en su propio domicilio. La investigación señaló como principal sospechoso a Francisco Javier Medina, pareja de la madre de la niña, pero años después sería absuelto por falta de pruebas concluyentes.
Hoy, más de una década después, el caso sigue sin resolverse y continúa siendo uno de los mayores enigmas criminales de España.
Hosted by Simplecast, an AdsWizz company. See pcm.adswizz.com for information about our collection and use of personal data for advertising.