La pregunta de Jesús, "vosotros, ¿quién decís que soy?", da un giro definitivo al Evangelio según Marcos (8:29), que lo divide claramente en dos. Una vez se establece su historicidad, la modernidad se enfrenta a la búsqueda del Jesús histórico, primero con tantas "Vidas de Jesús" que hablan más de su autor que del protagonista del Evangelio y luego con tres fases de investigación académica que no han logrado provocar más que controversias. Canciones y películas se hacen también esa pregunta, que intentamos contestar hoy.
En nuestro viaje por la vida paramos hoy para pensar en ello con la sintonía de Ruta 66 a cargo esta vez de Mark Winkler, un músico de jazz angelino que desde los años 80 se ha hecho conocido por su tranquilo y relajado "swing", que en 2003 dedicó un disco al autor de la cabecera de nuestro programa, Bobby Troup. La sensible cantautora californiana Judee Sill (1944-1979) está ahora de actualidad por un cómic que recorre su turbulenta vida de la mano de dos autores españoles. Una de sus canciones más conocidas es la enigmática "Jesús era un fabricante de cruces". El clásico de "Jesús está bien (para mí)" es originalmente un góspel de los Ryenolds, pero lo popularizan músicos de rock desde la versión de los Byrds en 1969, que formó parte de la película de moteros que comienza el Nuevo Hollywood, "Easy Rider" (1969).
La película "Rey de reyes" (1961) es el inicio de una nueva visión de Jesús en el cine, que prescinde ya del texto literal de los Evangelios, para entrar en una seria reflexión sobre el contexto histórico, sobre todo político de la Palestina del siglo I, dominada por los romanos. Su autor no puede ser más sorprendente. Nicholas Ray es conocido por ser el creador más personal e intimista de Hollywood desde antes ya de su éxito de "Rebelde sin causa". No es una obra personal, puesto que se trata de una de los intentos de hacer superproducciones fuera de Hollywood, que compitan con la televisión sin los altos costes que suponía ya rodar en Estados Unidos. Es una producción del judío americano de origen bielorruso, Samuel Bronston, que estableció su base en Madrid. Como sobrino de Trotsky, no es extraño que acudiera al represaliado comunista Philip Yordan, purgado en las "listas negras", para hacer el guion. Lo sorprendente es que lo hiciera en la España de Franco. Escuchamos escenas de la película con el doblaje original, que comenta José de Segovia con la música de la banda sonora de Miklos Rozsa.
Si hay un cantautor cristiano americano contemporáneo conocido por sus estudios de teología, ese es Michael Card. Y al pensar en el anuncio que hace Jesús de su muerte a continuación en la Buena Noticia según Marcos (8:31-38) no hay mejor ilustración que su disco "Reconocido por sus cicatrices" (1983). Ponen su mirada también "Arriba en una cruz" el dúo de DeGarmo y Key en 1986, que lograron el primer Grammy para un disco de "música cristiana contemporánea" para esta banda de rock formada en 1976. "¡Ven a la Cruz!" es la invitación final que nos hace el ahora octogenario Dion DiMucci en 1985, creador del "dudúa" o "doo-wop" en los años 50, que se convirtió al cristianismo evangélico a finales de los 70, para volver finalmente al catolicismo en que se crio.en el Bronx de Nueva York. Seguiremos nuestro viaje a la luz de la segunda parte del Evangelio, que comienza en este capítulo...