“Nada se acerca más a otra cosa que la tolerancia al conocimiento, que la indulgencia a la (real) fuerza y que la condescendencia a la hermandad”.
Mediante estas elevadas palabras el Imam As-Sâdiq (la paz sea con él) nos señala el vínculo estrecho que existe entre la tolerancia y el entendimiento. Es decir, para que puedas comprender las cosas debes contar con capacidad de discernimiento, pensamiento maduro y fuerza de carácter. La Verdad es perfección y solo la puedes alcanzar mediante elevados atributos. Para lograrlo, la indulgencia te aportará la fuerza, el poder y la capacidad; pero la finalidad no es el simple conocimiento sino la hermandad, la confraternidad, que se obtienen gracias a la condescendencia. En tal sentido, el conocimiento se fundamenta en la integración de esas tres cualidades sublimes.