Un científico, de la Universidad Cambridge en Inglaterra, salió por las noticias prediciendo que la longevidad de la vida se extenderá algún día hasta los 1000 años. Él indica que el envejecimiento es causado por las toxinas en el cuerpo. Al aprender cómo reducir las toxinas en el cuerpo, envejeceremos más despacio y viviremos más.
Suena bien, pero, ¿mil años? Yo creo que continuaré siguiendo el consejo de la Biblia para envejecer que dice, “enséñanos a contar nuestros días” (Salmo 90:12). En vez de enfocarnos en cuántos días más tenemos, la Biblia nos enseña que debemos vivir todos los días al máximo, disfrutando de cada bendición y provisión de Dios.
La calidad tiende a troncar la cantidad. Cuando hacemos de cada día un mejor día, el número de días que vivimos cobra cada vez menos significado. La Biblia dice, “Pues tú eres la fuente de la vida, la luz con la que vemos, (Salmo 36:9a, NTV)”
— Dr. Rolando D. Aguirre
