El magazine “Forbes” mantiene estadísticas actuales de las personas más ricas del mundo. También ha reportado la conexión que tienen las riquezas con la felicidad. El magazine compartió que encontraron el mismo nivel de felicidad en las cuatrocientas personas más ricas del mundo con cuatrocientas personas de la tribu Maasai en el Este de África.
Muchas de las personas que me escuchan hoy pensarán que ellas son la excepción y que las riquezas los harían increíblemente felices. La Biblia dice que las personas eternas no pueden ser verdaderamente felices con las cosas temporales. El dinero es práctico y muy necesario, pero nunca puede comprar la felicidad que estamos buscando.
Busca el propósito de Dios con el dinero y te darás cuenta que esta conectado con servirle a otros o servirle a Él. Cuando Dios es el primero en tu vida, Él siempre proveerá tus necesidades materiales, pero aún más importante, hará que tu alma prospere. La Biblia dice,
“El Señor los guiará continuamente, les dará agua cuando tengan sed y restaurará sus fuerzas.
Serán como un huerto bien regado, como un manantial que nunca se seca, (Isaías 58:11, NTV)”
— Dr. Rolando D. Aguirre