Constantemente escucho personas que cuando están envejeciendo me dicen, “soy tan productivo ahora como cuando estaba joven”. Uno de ellos en respuesta a esto dijo, “si alguien estaba haciendo lo mismo a los sesenta años que a los veinte fue porque entonces a los veinte no estaba haciendo mucho”.
Cualquiera que sea nuestra edad, la mejor manera de vivir es poniendo nuestro pie en el pedal del acelerador para avanzar hacia delante. Cuando la Biblia habla de vivir de esa manera, se refiere a redimir el tiempo. Es como si tuviéramos que comprar el tiempo. No lo desperdiciaríamos, ¿verdad? Debemos en ese sentido comprar o aprovechar cada oportunidad para vivirla productivamente. Un minuto, un día, un mes, o un año perdido, es tiempo que no volveremos a ver.
El tiempo es muy preciado, así que no pierdas ningún minuto de tu vida. Aprovecha cada espacio de tus días. Hay cosas maravillosas que pueden llenar nuestros días si solamente somos intencionales en hacerlo. La Biblia dice, “Saquen el mejor provecho de cada oportunidad en estos días malos”, (Colosenses 4:5, NTV).
— Dr. Rolando D. Aguirre