Después de la muerte de la japonesa Chiyo Mikayo, el 22 de Julio del presente año, la persona viva más anciana del mundo es la japonesa Kane Tanaka, con 115 años y 217 días. Al preguntarle a las personas que llegan a vivir más de 90 años de edad la clave de su longevidad, ellos responden cosas como: comer bien, dormir bien y no preocuparse tanto.
Parece ser un consejo muy simple pero a la vez difícil en su práctica porque nos preocupamos por muchas razones, nos malpasamos en no descansar bien y en nutrirnos de una manera desbalanceada. De hecho, al leer los nombres de las 35 personas más longevas del mundo, no encontramos ningún nombre latino ni nadie que resida en Iberoamérica. ¿Por qué? Porque los latinos somos por naturaleza más emotivos, apasionados, nos preocupamos de más, y vivimos muchas veces vidas con excesos bien sea por tener o no tener.
Medita un poco en cómo vives tu vida. La receta simple de comer bien, dormir bien y no preocuparse tanto no debe ser nada descabellada. Al final de cuentas, Dios es el único que conoce el número de nuestros días pero nosotros debemos cuidarnos cada día. La Biblia dice, “Enséñanos a entender la brevedad de la vida, para que crezcamos en sabiduría”. (Salmos 90:12, NTV).