Listen

Description

Dios no esperó a que el mundo fuera digno; vino cuando el mundo estaba roto. El amor divino siempre da el primer paso. En esta vida muchos aman en reacción, pero no por convicción. Entonces, contempla la Navidad como la prueba eterna de un amor que se adelanta, busca, restaura y rescata.
Además, el amor que se adelanta no se limita a sentir; actúa. Así pues, piensa en alguien que necesita un gesto de gracia. Por ejemplo, un mensaje, una disculpa, un regalo sencillo o una oración. Amar como Cristo no es opcional; es el sello del discípulo. De la misma manera, cada acto de amor abre una ventana para que otros vean al Salvador.
De manera que, haz hoy lo que el amor haría primero. Así te alineas al corazón del que vino antes de que lo buscáramos. La Biblia dice en 1 Juan 4:19: “Nosotros le amamos a él, porque él nos amó primero”. (RV1960).