¿Te sientes suficiente?
Hoy te platico una experiencia sobre la herida de merecimiento que descubrí en mí y que se muestra como insuficiencia.
El nunca parar, no celebrar, no descansar y más directamente el sentir que nunca nada es suficiente en tu vida es señal de que no nos sentimos merecedoras...y ¡sí merecemos! Y eso hay que sanarlo porque merecemos por el simple hecho de existir, de SER.
Te cuento más acá, dale play para escucharlo.