El caso que trae la DEA no es grande, es enorme y tiene implicaciones muy graves y con muchísimas ramificaciones para las que el país debe irse preparando. Lo que viene no va a ser bonito, pero por el futuro del país, a fin de salvarlo a tiempo, será necesario. Ayer, circularon denuncias de que Gamboa había recibido amenazas de muerte en La Reforma. Sinart Digital lo confirmó e indicó que la policía penitenciaria aumentó las medidas de seguridad para asegurar su protección. Por amor de Dios: que así sea. Es imperativo que bajo ninguna circunstancia corra peligro la integridad del exmagistrado. Su aporte al futuro de este caso es de la más alta importancia.