Los estragos de la revolución francesa a finales de 1700 obligaron a un ciudadano francés a cambiar residencia y avecindarse en la ciudad de Viena donde conoció a los afamados compositores de la época. A principios de 1800 escribió una serie de cartas relatando su trato con el famoso Hayden y las circunstancias particulares de la capital del recién desaparecido Heiliges Römisches Reich Deutscher Nation o sacro imperio romano germánico. (Eduardo Figueroa)