Rusalka es una ondina que se sacrifica para tomar el aspecto humano pues está enamorada de un príncipe. Abandonada y humillada por su amado vuelve al lago. El príncipe, arrepentido por haberle sido infiel, la sigue y muere en sus brazos después de pedirle un beso que resulta mortal. Ella regresa a las profundidades convertida en un demonio de muerte que emerge para conquistar a los humanos que se acerquen al lago.