La historia de Bessie es un testimonio inspirador de cómo las casualidades pueden abrir puertas hacia un éxito inesperado, y cómo el arte del tatuaje puede convertirse en un medio para empoderar y reconstruir vidas.
Bessie se esmeró en crear un ambiente relajado para aquellas mujeres que buscan tatuarse, brindándoles comodidad y seguridad. Su talento artístico ha trascendido fronteras, llevándola a realizar viajes y plasmar su arte en otros estudios alrededor del mundo.
Además, destaca por su labor en la reconstrucción de la feminidad y la esperanza en pacientes que han superado el cáncer de mama, a través de hermosos tatuajes que les devuelven su confianza.