Yahweh Shalom: El Señor es nuestra Paz. Gedeón temía morir después de ver al ángel del Señor cara a cara. Pero el Señor le dijo: “la Paz sea contigo, no temas; no morirás”. Esto tuvo tal impacto en la vida de Gedeón que construyó un altar allí y lo llamó Yahweh Shalom (Jueces 6: 22-24). Shalom habla de plenitud, armonía e integridad. Shalom no depende de las circunstancias.
Gedeón conocía bien esta paz desde la época en la que él y su gente estaban rodeados por un enemigo feróz. No había nada en ese momento que pareciera "pacífico". Sin embargo, Dios se mostró fuerte a favor de ellos, fue fiel y trajo liberación directamente a través de los días llenos de temor.
“La paz sea contigo” fueron las palabras de Jesús, en la parábola donde Jesús calma la tempestad salvaje mientras está en la barca con sus discípulos (Marcos 4: 35-41). La paz de Dios trasciende nuestro entendimiento y desafía nuestra experiencia. El apóstol Pablo ora: “Que la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guarde nuestros corazónes y nuestras mente en Cristo Jesús” (Filipenses 4:7).
La paz de Dios a menudo no tiene sentido para un mundo que nos dice que nos apresuremos y nos preocupemos. Un mundo que parece duro algunos días, rápido, apresurado y estresante, y luego lento y lleno de luchas al día siguiente. En medio de todo, Él nos recuerda que Él es nuestra verdadera paz, por lo que nunca debemos temer. Dios es el único capaz de darnos la paz que sobrepasa todo nuestro entendimiento. No importa lo que enfrentemos. En tiempos de mayor oscuridad, en las tormentas de nuestra vida, Yahweh Shalom desea inundarnos de paz.
Hoy, recuerda que la verdadera paz proviene solo de la total confianza en el Señor en todas las áreas de nuestra vida. “Que el mismo Señor de la paz nos conceda continuamente paz en toda circunstancia. ¡El Señor sea con todos nosotros! " (2 Tesalonicenses 3:16).
Oramos para que estes quieto y conozcas que Yahweh Shalom es tu Dios (Salmo 46:10), y que Él será exaltado en tu vida.
Oración:
Padre Celestial, te doy gracias porque tu nombre es Yahweh Shalom: El Señor es nuestra Paz. Tu Shalom eres mi plenitud y armonía. Tu paz no depende de mis circunstancias. Hoy te ruego que invadas las tormentas de mi vida con Tu paz. Gracias porque Tu paz sobrepasa mi comprensión y mis experiencias. Serás exaltado en mi vida. Confío en ti y te doy la bienvenida como Señor de la Paz.
En el nombre de Jesus,
Amén.
