Felipe Calderón apuesta a César Nava. Están en juego las posiciones estratégicas en el Congreso y la influencia del presidente de la República en las leyes que le puedan dar libertad para gobernar, en este sistema presidencialista. Los neopanistas que destruyeron la imagen de honestidad y congruencia ideológica del blanquiazul harán de Calderón un presidente débil sus últimos 3 años de gobierno. El PAN no aprende a ser un partido en el poder. Por eso mereció perder en las pasadas elecciones federales. Vicente Fox, Creel, Espino, García, Priego, entre otros, son los interesados en bloquear a Calderón y lograr el milagro de que regrese el PRI a los Pinos.