8:11 Vale más la sabiduría que las piedras preciosas. 12 Yo, la sabiduría, convivo con la prudencia, conocimiento y discreción. 13 Quien teme al Señor aborrece lo malo, el orgullo, la arrogancia, la mala conducta y el lenguaje perverso. 14 Míos son el consejo y el buen juicio, el entendimiento y el poder. 18 Conmigo están las riquezas y la honra. 19 Mi fruto es mejor que el oro fino; que la plata refinada.