Listen

Description

En el capítulo de hoy, llegamos a la consumación del matrimonio entre Salomón y la Sulamita. Mutuamente se descubren, y disfrutan de la atracción física. De forma poética, se describe la belleza de la sulamita; que importante es admirar y dedicar palabras dulces a nuestras esposas. El mismo Rey Salomón aconsejó en el libro de Proverbios: "Sea bendito tu manantial, Y alégrate con la mujer de tu juventud, Como cierva amada y graciosa gacela. Sus caricias te satisfagan en todo tiempo Y en su amor recréate siempre" (Proverbios 5:18-20). La unión y la intimidad física es algo que se debe reservar para el matrimonio. A partir de aquí, Salomón se refiere a la mujer como su esposa; también la llama su amiga, y su hermana, de forma cariñosa; la esposa es parte de él, están unidos y ahora ya no son más dos, sino uno. La intimidad sexual no tiene únicamente un carácter para procrear y tener hijos. No. Dios creó la sexualidad para que hombre y la mujer se recreen, se gocen, y se renueven física y emocionalmente. Que el Señor nos ayude a disfrutar de este precioso don dentro de la seguridad y la bendición del matrimonio. Que el Señor te bendiga.