Dices que quieres un hombre presente y comprometido… pero cuando aparece, lo invades con tu checklist emocional, tu entrega desbordada y tu necesidad de control.
¿Resultado? Se aleja. No porque no quiera amor, sino porque no quiere ser salvado.
Si te sientes identificada, pincha en este enlace para transformar tu manera de amar:
Un abrazo enorme,
Elsa y Adrian