Las acciones globales continuaron con la tendencia a la baja en septiembre en medio de la subida de tipos de la Reserva Federal junto con otros grandes bancos centrales y datos de inflación que continúan superando las estimaciones.
Lo anterior junto con otros factores como la guerra entre Rusia y Ucrania y los confinamientos en China están sosteniendo la incertidumbre y elevada volatilidad no sólo en las acciones, sino también en la renta fija, que este año de fija tiene poco.