Pablo continúa hablando de las relaciones que un creyente podría haber tenido en aquellos tiempos. Ahora habla a los amos y les pide que muestren el carácter de Dios en su trato con aquellos que les servían.
"Amos, sean justos e imparciales con sus esclavos. Recuerden que ustedes también tienen un Amo en el cielo," (Col. 4:1, NTV).