Pablo revela a los Efesios que, de acuerdo al plan de Dios, los creyentes tenemos una herencia en Cristo.
"Es más, dado que estamos unidos a Cristo, hemos recibido una herencia de parte de Dios, porque él nos eligió de antemano y hace que todas las cosas resulten de acuerdo con su plan", (Efesios 1:11, NTV).
"En él asimismo tuvimos herencia, habiendo sido predestinados conforme al propósito del que hace todas las cosas según el designio de su voluntad", (Efesios 1:11, RV60).