En este proverbio se nos habla acerca de los efectos de ser dominados por el vino. Es muy probable que este consejo sabio esté en el contexto de una persona que ya llegó a la embriaguez o a una dependencia del vino.
"El vino lleva a la insolencia y la cerveza al escándalo; ¡nadie bajo sus efectos se comporta sabiamente!", (Prov. 20:1, NVI).
"El vino produce burlones; la bebida alcohólica lleva a la pelea. Los que se dejan llevar por la bebida no pueden ser sabios", (Prov. 20:1, NVI).