En este segundo domingo de Adviento, reflexionamos sobre el llamado de Juan el Bautista: “Preparen el camino del Señor, enderecen sus sendas.” La vida puede ser caótica y desordenada, pero el Evangelio nos invita a abrir espacio para que Jesús entre en nuestros corazones, especialmente al acercarnos a la Navidad.
Propongo cinco maneras prácticas —los Cinco Hábitos del Discípulo de San José— para preparar ese camino. Te invito a elegir uno o dos para crecer en ellos esta semana.
1. Orar con Propósito.
San Pablo nos dice: “Oren sin cesar.” La oración es simplemente pasar tiempo con Dios. Esto puede ser un momento diario de silencio, leer los Evangelios, priorizar la Misa dominical o visitar la Adoración. ¿Qué acción concreta puedes hacer para estar en conversación con Dios cada día?
2. Conectarse Consistentemente.
Jesús promete estar donde dos o tres se reúnen en su nombre. La fe crece cuando caminamos juntos. Podemos conectarnos con familia, amigos y feligreses, especialmente durante nuestros fines de semana “Conocidos por su Nombre.”
3. Invitar Intencionalmente.
Dios desea que su casa esté llena. Esta Navidad, piensa en alguien que esté lejos de la Iglesia o de la fe. Una invitación tuya podría abrir una puerta al encuentro con Dios.
4. Servir Desinteresadamente.
Cada uno tiene dones para el bien de los demás. ¿Cómo puedes usarlos esta semana? En tu hogar, tu comunidad, tu trabajo o iniciativas como el Árbol de Regalos de Adviento.
5. Dar Generosamente.
Jesús nos enseña que con la medida con que damos, recibimos. La generosidad abre nuestro corazón y permite que Dios lo llene aún más.
En conclusión: para preparar el camino del Señor, elige uno de estos cinco hábitos y ponlo en práctica. Al hacerlo, abrimos nuestro corazón para recibir a Jesús esta Navidad.
