Una profunda reflexión sobre Lucas 9,57-62 y la memoria de Santa Teresita del Niño Jesús. Jesús nos llama a un discipulado radical: sin excusas y sin mirar atrás. Este episodio toca las luchas de las comunidades hispanas, desafiándonos a dejar la fe de conveniencia para ser testigos auténticos en nuestros hogares, escuelas, trabajos y parroquias. Inspirados por el “caminito” de Santa Teresita, recordamos que la santidad comienza en los pequeños actos de amor vividos con gran fe.