¡Cuidado y te Caes! -Parte II
Cuando Dios decidió crear al ser humano, lo dotó de una capacidad intelectual superior a la del resto de seres vivientes. Dios nos dio la capacidad de hablar, pensar y socializar de una manera única; por esto, somos privilegiados.
Pero esta capacidad también nos hace responsable de nuestros actos, y debemos rendirle cuentas a Dios por todo lo que hagamos.
No obstante, Dios está de nuestro lado para ayudarnos a resistir y afrontar cada situación, con la victoria como única meta. Por eso, constantemente sus consejos están con nosotros.
En este programa continuamos ayudándote a distinguir los tropiezos más frecuentes en el camino del cristiano, y la forma cómo evitarlos.
