Voluntad de Dios - Parte IV.
Dios anhela que vivamos en sus buenos mandatos y estatutos sin avergonzarnos de ello, y que con nuestro ejemplo de vida podamos ayudar a otros a acercarse a su presencia, para que ellos también vivan en su buena voluntad. Dios espera que nos enorgullezcamos de Él como Padre, y que llevemos con honra ese estilo de vida que Él nos ha presentado.
Somos llamados a ser luz en medio de las tinieblas, a marcar una diferencia entre lo cotidiano y perverso de este mundo.
Como hijos de Dios debemos parecernos a Él, y debemos representarlo en esta tierra; como si llevásemos su apellido. Dios es luz, Él es todo lo bueno ajustado en una sola persona, y aunque no podremos compararnos con su magnificencia, parte de nuestro propósito es resplandecer con nuestro testimonio.