¡Ni Lo Pienses!
Cuando oramos podemos estar seguros que Dios siempre nos escucha y nos responderá. Tal vez su respuesta sea si, o tal vez su respuesta sea... ¡Ni lo pienses! Cuando esto nos pase, debemos agradecer a Dios y quedarnos tranquilos, confiados en que Dios nos ama y sabe lo que es mejor para nosotros. Si insistimos, podemos sufrir las consecuencias de nuestras malas decisiones...
Así que, ¡Obedece!
No esperes que te hable una burra, como le ocurrió a Balaam.