El blog de Saúl Pérez. Blog sobre desarrollo personal, coaching, paz interior, etc. Quiero compartir con vosotros mi creencia de que los días no son ni buenos ni malos, los días son nuestras creaciones y nosotros somos los que decidimos cómo queremos vivir cada día.
Pero, ¿qué pasa si desde que nos levantamos, empezamos a etiquetar nuestro día por el tiempo que hace, por el día de la semana que es (Recuerdo que de pequeño leía los cómics de Gardfiel, y Gardfiel odiaba los lunes), por lo que ese día sé que tengo que hacer, por una llamada, sms o whatsapp recibido, por el horóscopo, por el pie que ponemos primero en el suelo, etc.?
Un ejemplo, imagina que te levantas y dices: ¡Uff, otra vez lunes! - Te asomas a la ventana - Vaya tela, y encima está lloviendo. Otro día que no puedo ir a correr.- Y recuerdas: Tengo que entregar el trabajo que me pidió mi jefe, y no lo he terminado.- Miras el periódico en la sección de horóscopo y lees: "Escorpio, día lleno de conflictos"... Ya lo que faltaba...