“Porque podéis profetizar todos uno por uno, para que todos aprendan y sean exhortados” 1 Corintios 14: 31
El don de profecía es una expresión vocal sobrenatural, espontanea en una lengua conocida que edifica, exhorta y consuela al cuerpo de Cristo. La palabra profecía significa hablar la mente y el consejo de Dios.
El don de profecía no es lo mismo que el oficio de profeta según lo que habla Efesios 4: 11, el don es para todos los creyentes, y una persona que en algún momento dado fluye con el don de profecía, no significa que sea profeta de oficio. Para el don de profecía, lo fundamental es la FE.
Al día de hoy muchas personas hablan de profecía sin ni siquiera saber de quién proviene esa palabra profética, dado por entendido que toda palabra profética proviene de Dios, sin importar que esa palabra llegue por Juan o Francisco, o Gilberto o si la profecía la diera una hermana, ya sea Adriana, Lucia, Gabriela o Carmen. Lo que debemos de estar claros es que si es de Dios se cumplirá, si es solo por la emoción o la buena intención del que está dando la palabra, hay que tener muchísimo cuidado en no confiar en palabras que no salgan del trono de Dios.
