Cayó el Recre ante el Racing y ello conlleva a un nuevo planteamiento de dudas respecto al sistema. Con la base puesta sobre lo que quiere Sergi, y que no va a cambiar, las dudas emergen en cada partido en función de lo que se está viendo. Creo que hasta que no se disputen diez encuentros, no llegaremos a la conclusión final sobre la idoneidad del sistema y sobre los planes B que habría que usar en momentos determinados del partido.
Hay veces que uno piensa en que el sistema pueda dar gran fútbol y victoria, y otras veces pienso que ese sistema es muy fácil de contrarrestar.
Yo de ser entrenador ordenaría a mis jugadores una presión muy arriba cuando se juegue en campo pequeño y montaría dos líneas de cuatro muy juntas por delante del portero cuando las dimensiones del terreno sean amplias.
Que todos los entrenadores ya saben como juega el Recreativo nadie lo duda. Si de un lado, el entrenador del Numancia, Manchí, logró cortocircuitar al Decano presionándoles muy arriba no permitiendo salida de balón, el sábado Fabri, juntó sus líneas y ello hizo que el Recreativo tuviera mucha posesión pero que ésta fuera estéril. Sólo dos ocasiones de gol en 94 minutos fue un balance paupérrimo.
Y yo me pregunto el porqué Sergi no usó un plan B cuando veía como su equipo podía estar tocando el balón dos días y no hacer ocasiones. Cuando pasaban ochenta minutos y no marcas por mucho que toque, bueno sería usar a dos nueves y colgar balones a la zona del área. Esto jamás lo hizo el Recre. Estuvo tocando y sobando la pelota hasta el final sin colgar ni un solo balón al área.
Este planteamiento debe ser usado cuando tu fútbol queda abortado por un sistema de contención que no te permite llegar al área.
Y tengamos en cuenta que este año el Recre no tiene en medio campo ni en la delantera hombres capaces de desbordar. Con la marcha de Javier Álamo y Fidel, los nuevos jugadores son de mucho toque, de calidad, pero no tienen desbordes para romper dos línea de presión. Desbordar es clave para la creación de espacios. En el Recre tal vez Jonathan Valle podría hacerlo, pero la intermitencia de este jugador me lleva a la sensación de que mucho deberá mejorar para ser ese futbolista determinante que el equipo necesita.
