PUNTO 4 – SA CARROSSA
En el siglo XIII la Corona Catalanoaragonesa era una gran potencia en el Mediterráneo.
Los catalanes conquistaron Ibiza a los musulmanes, en 1235, como parte de su política de expansión. Por este motivo, ahora la lengua propia de las islas es el catalán, lengua románica que deriva del latín como el castellano, el francés, o el italiano. Como consecuencia de las victorias militares de los castellanos ante los catalanes y de la posterior dictadura del General Franco, el uso del catalán quedó reducido a un ámbito familiar.
No fue hasta los años 80 que se volvió a recuperar el uso normal de la lengua. Como parte del Estado Español, Ibiza posee como lenguas oficiales el catalán y el español.
Tienes ante ti una escultura de bronce sentada en un banco y con un libro del mismo metal al lado:
El hombre que representa esta estatua es Isidoro Macabich i Llobet, hijo ilustre de la Ciudad de Ibiza.
Isidoro Macabich nació en 1883 en Ibiza y está considerado como el gran impulsor de las letras y la cultura ibicencas.
Tuvo una actividad realmente polifacética: principalmente era el canónigo archivero de la Catedral de Ibiza, historiador y arqueólogo consolidado, también ejerció las profesiones de escritor, poeta y periodista.
Además de su obra en pro de la cultura pitiusa, cabe destacar su labor como profesor. Muchos de los jóvenes isleños aprendieron con él a escribir y a querer nuestra lengua, como por ejemplo fue el caso de Mariano Villangómez, el poeta y traductor de tradición novecentista más destacado de nuestra literatura y Premio de Honor de las letras catalanas.
Por encima de todo esto destaca sobretodo el amor que de sus obras se desprende hacia la isla de Ibiza, sentimiento que transmitió durante toda su vida.
Su obra más importante es Historia de Ibiza publicada en 1966.
Disfrutó siempre de la estimación general de los ibicencos y formenterenses, de hecho de el se cuentan muchas y muy variadas anécdotas, pero tal vez una de las más populares y extendidas sea aquella en la que un señor le preguntó un buen día si era verdad que su apellido era uno de los más nobles de Ibiza, a lo que D. Isidoro Macabich respondió con la espontaneidad que lo caracterizaba:
“... hijo mio, en ibiza no hay nobles, todos somos hijos de marineros, hijos de payés o hijos de puta”
En honor a su memoria y como homenaje, en 1980 se levantó este monumento en la calle donde vivió durante tantos años. Este es un rincón muy especial, donde se puede apreciar una mezcla de colores, ensalzados por la luz que continuamente los riega y que a tantos personajes ilustres ha inspirado.
>>
Ahora debes continuar todo recto hasta encontrar unas escaleras con unas rejas de hierro negras, debes subir por ellas e ir a ver la vista que hay desde el primer miradora la izquierda.
Mientras caminas te explicaremos como fue el paso por nuestra isla de algunos famosos intelectuales. Sino lo quieres escuchar pulsa ahora stop.