Este se constituye en mi primer poema. Está conformado por 12 versos en tres párrafos; inspirados en un fallo de la corte constitucional colombiana en 2019. Este fallo permitía que las personas pudiesen consumir marihuana, cocaína y otras sustancias sico-activas en espacios públicos. Afortunadamente el desacuerdo social no dió cabida a este exabrupto.