Esto no es poesía
ni podría serlo aunque quisiera.
Es la parte de nosotros
que tanto niego haber querido,
es la suerte de haber estado
y conocerte,
vivirte como te he vivido,
es la quimera, la fantasía,
es de la noche el frío
que de tu boca nacía inerte
como un mendigo atónito de ver
de nuevo nacer el día.
Esto no es poesía
si lo piensas un instante,
ni siquiera el pertinaz
lamento que flota en el aire
de falaz amante,
de atribulado donante
confundido
por tanta sangre
derramada sin sentido,
entre tus sábanas blancas
y mi venas
abiertas como granados frutos
del fugaz destino.
No es poesía,
no,
no lo es la fiebre que te niega
y que en tu pecho se dormía
al hacerte mía con esta furia ciega,
con la que despierto
y convivo día tras día.
Esta espesa agonía que me ahoga
y me entierra en tus besos y en tu risa,
que me clava una cruz de hierro
en las costillas,
antes de extender la mano
en la penumbra
donde yo confundía tu amor
y tu cuerpo con el hogar
que ahora veo perderse
en la lejanía como un sueño,
como una disculpa
tan inútil como tardía.
No lo es, esto no es poesía.
Aunque caigan las palabras
entre vías muertas,
con dolor sobrehumano,
que salmodian y gimen
conformando el mundo
que dejaste agonizando
en la palma de mis manos.
Esto no es poesía.
Si así lo quieres,
será solo prosa, extraña amiga
que reposa y me acompaña murmurando,
ramplona y burda, mundana y descuidada,
mientras yo,
¡oh, estúpido enamorado!
aún te sigo esperando.
Autor: Raúl Tamarit Martínez
Música: Michael Ortega-Tears Won't Heal