Regresamos después precario del descanso vacacional.
La lucha de clases se intensifica y acelera.
Nada está como ayer, y profundas fuerzas del cambio social empujan con intensidad superior.
Nuestro objetivo es estar siempre a la vanguardia, con audacia, audacia, y más audacia.
La trinchera está bien fortificada y solo saldremos de ella de frente, a combatir al enemigo en su propio terreno. HASTA LA VICTORIA