La vida no es como nos la contaron. Lo cierto es que una, que se creía especial porque se lo repitieron hasta la saciedad, pensaba que la suya iba a ser una vida diferente. Mágica. Demasiadas películas con final feliz, demasiadas promesas de momentos irrepetibles, demasiados anuncios de sonrisas profident y camisas blanco inmaculado...