Los que empezamos escribiendo un blog hace más de diez años contábamos con miles de lectores y, por lo novedoso y sofisticado del invento, cuanto escribíamos lo tomaban tan en serio como un periódico; parece que fue ayer cuando publiqué el primer posteo sobre mi visita a una cárcel estadounidense, mas los años transcurridos no pasan tecnológicamente en balde y así, con la sencillez de las nuevas plataformas, se extendió su uso y nos alcanzó el blogoboom con la consiguiente disminución de lectores que se repartieron entre miles de nuevos blogueros.
Sin embargo, de dos años a esta parte, ya nadie presta atención a los blogs (...) Artículo para miciudadreal.es