En la ciudad costera de Halicarnaso, hoy conocida como Bodrum en Turquía, se erigía una de las estructuras más impresionantes de la antigüedad: el Mausoleo de Halicarnaso. Esta tumba monumental, construida en el siglo IV a.C., no solo destacó por su grandiosidad arquitectónica, sino también por ser una de las Siete Maravillas del Mundo Antiguo. Este mausoleo ha dejado una huella indeleble en la historia, y su legado perdura en el propio término "mausoleo", que se utiliza hoy para referirse a cualquier tumba grandiosa.