Salmo 92:12-15. ¨Como palmeras florecen los justos; como cedros del Líbano crecen. Plantados en la casa del Señor, florecen en los atrios de nuestro Dios. Aun en su vejez, darán fruto; siempre estarán vigorosos y lozanos, para proclamar: «El Señor es justo; él es mi *Roca, y en él no hay injusticia.¨
En esta prédica encontrarás un mensaje de restauración y paz al recibir de Dios la promesa que en Su presencia, todas las áreas secas de nuestras vidas, florecerán.