¿Alguna vez un álbum ha tenido un título más apropiado que “Raw Power”?
¿Qué palabras podrían describir con mayor precisión el contenido de este clásico de los Stooges, lanzado en los EE. UU. el 7 de febrero de 1973, que “Crudo” y “Poder”?
Esa era la esencia de los Stooges.
Quitaron toda la pompa y los adornos innecesarios del rock and roll al reducir la música a un estado primordial exquisito.
Es tan básico como brillante.
Igualmente, la historia detrás de “Raw Power” es un poco más complicada.
Fue y no fue el tercer álbum de los Stooges.
Unos años antes, la banda de Ann Arbor, Michigan, había grabado un par de álbumes (“The Stooges” y “Fun House”) para el sello Elektra, donde ganaron más notoriedad que dinero por las ventas de discos.
Luego se produjo la ruptura de la banda, al mismo tiempo que la adicción a las drogas los dominaba.
Por otro lado, David Bowie era un gran admirador de sus dos primeros discos y descubrió un espíritu afín en Iggy después de conocerlo en New York.
Con Iggy sin compromisos con los Stooges, y cayendo en espiral por el camino del abuso de sustancias, Bowie lo llevó a Londres.
La superestrella glam recién acuñada consiguió que Iggy firmara un contrato de gestión (con la misma firma que manejó a Bowie) y le consiguió también un contrato como solista con Columbia Records.
Iggy Pop sabía que quería la ayuda de James Williamson en el nuevo álbum, quien había sido agregado como segundo guitarrista en los últimos días de los Stooges, pero la pareja que formaba junto a Bowie no pudo encontrar una sección rítmica en el Londres de 1972 que compartiera su visión única de rock and roll. Y así, decidieron reunirse con los Stooges originales, los hermanos Scott y Ron Asheton.
Scott volvió a su asiento detrás de la batería, mientras Ron pasaba de la guitarra al bajo.
Entonces, lo que se suponía que era un disco en solitario de Iggy Pop se convirtió en el tercer álbum de los Stooges.
Como un compromiso entre la intención y la realidad, la banda sería acreditada como Iggy and the Stooges.
En todo caso, llamá a la banda como quieras: estos muchachos crearon el modelo definitivo para el punk rock con guitarras fuertes y ritmos vertiginosos, mientras Iggy gruñía: "Tu cara bonita se va al infierno".
No es de extrañar que los futuros punks hayan tomando notas de todo esto.
Incluso las dos baladas del disco (en una cuota solicitada por Columbia) están superpuestas con una mugrienta sordidez de callejón, lo que demuestra que este proto-punk era potente a cualquier velocidad.
“Raw Power” también demostró que James Williamson era un sucesor digno, aunque marcadamente diferente, de Ron Asheton como guitarrista de los Stooges.
Williamson cambió el lado psicodélico y blues de Asheton por un golpe de gracia metálico que era justamente más crudo y poderoso.
Negándose a ser relegado a un segundo plano, Asheton creó el complemento perfecto para la guitarra de Williamson con duras líneas de bajo.
Es casi como si estuviera castigando al instrumento por su cambio al bajo.
Iggy fue el primero en mezclar el álbum.
Cuando los resultados fueron mediocres, se contrató a Bowie para crear una mezcla que Columbia encontrara adecuada.
Aunque solicitó la ayuda de su amigo, nadie dentro o alrededor de la banda estaba contento con el resultado.
Con el tiempo, la mezcla de Bowie se ha visto mucho más favorablemente, principalmente porque el álbum nunca ha sonado tan bien cuando se han intentado otras remezclas (ni siquiera la de Iggy años después lo logró).
Sin ningún tipo de duda, casi todo lo relacionado con “Raw Power” se ha vuelto mucho más apreciado con el tiempo, siendo hoy un clásico total.
Habiendo tocado solo el fondo de las listas de éxitos en el '73, el proyecto fracasó y aceleró la segunda ruptura de los Stooges.
Dicho eso, “Raw Power” reveló a Iggy como un genio lunático, aullador y sonriente. Ya sea sigilosamente ("Gimme Danger") o invitando al apocalipsis ("Search and Destroy"), Iggy nunca había sonado tan concentrado como aquí, y sus letras mostraban una intensidad que era más que un poco inquietante. En muchos sentidos, casi todo lo que Raw Power tiene en común con los dos álbumes de Stooges que lo precedieron es su sonido primitivo, pero mientras que los Stooges alguna vez sonaron como la pandilla más salvaje (y extraña) de la ciudad, Raw Power los encontró fuertemente armados y listos para destruir el mundo, es decir, si no se destruyeron a sí mismos primero.
Luego de ya cinco décadas, “Raw Power” es aclamado como un clásico adelantado a su tiempo y fue una gran influencia en artistas que van desde los Sex Pistols a Black Flag, de The Clash a Nirvana.
Existen pocos himnos punk mejores que el single principal de “Raw Power” titulado "Search and Destroy”.
Un tema en el que Iggy Pop se declara a sí mismo como un "guepardo callejero con la mano llena de napalm".
Esos Stooges, sobre todo Iggy, ciertamente tenían una habilidad muy especial con las palabras.
Esto fue “Raw Power”, de Iggy Pop and the Stooges, en Punto Muerto.
Esto es para ustedes, para todos los muchachos olvidados.