Llegamos tarde, no tanto como el Goya, a rendir pleitesía al que consideramos nuestro director de cabecera. Aunque ya hayamos tocado algunos trabajos suyos, hoy nos centramos en su figura. Y sólo se nos ocurre decir: GRACIAS. Gracias por tantas horas de cine y diversión. Gracias por todo, don Mariano Ozores.
A los aparatos, como acostumbramos, Roke Noparodedarporculo Lampreave, Epilio Bulgarito Salcedo, Héctorpedo y el señor Henry Bebeteotro Warnimont.