Stendhal descubre un amor de Miguel Angel, Había una vez un escritor francés que logró volverse italiano. Así quería Stendhal que lo recordaran (incluso pidió que en su lápida dijera: “Enrico Beyle, italiano. Vivió, escribió. Amó”). Eso no le impedía confesar que, cada vez que tenía que decirse algo importante a sí mismo, se lo decía en inglés, porque es necesario ser conciso para las cosas importantes. Stendhal se sabía gozosamente bocón, en una época y un lugar en que no era aconsejable ser bocón.