Si realmente deseas cambiar, puedes hacerlo. La ciencia ya ha demostrado que el cerebro posee neuroplasticidad, es decir, que tiene la capacidad de adaptarse y cambiar como resultado de una modificación de la conducta y la experiencia. Esto nos lleva a lo que solemos decir en Emoconciencia cuando hablamos de conceptos internos y, la conducta lo es, “si de verdad quieres cambiar, tú puedes hacerlo…”.