La escapada habitual; los pinchazos habituales, de los que no se libran ni Bartali, ni Coppi.
Y el paso por el túnel: Cecchi, Bellini, Toccaceli. Fausto se retira bajando el Turchino, tras el enésimo pinchazo.
Y tenemos a Bartali en la Riviera dirigiendo la persecución.