Para alimentar la esperanza de quedarse en Primera, es indispensable ganar partidos como el que ayer Temperley le ganó a Talleres de Córdoba. Fue certero el local para golpear en momentos clave y supo aguantar cuando la pasó mal, con Leandro De Bórtoli como gran figura. Ahora, después del 2-1, Temperley salió de la zona de descenso y quedó a un punto de Huracán y a dos de Aldosivi, ambos con un partido menos. “Conseguimos tres puntos valiosos que son un alivio. Nos quedan tres finales. Tomaremos a cada partido como el último”, aseguró Leonardo Di Lorenzo tras el esforzado triunfo.