Por fin, tras varios aterrizajes fallidos, un prototipo SN15, de la nave Starship ha conseguido aterrizar con éxito. Tras este éxito, el objetivo de la empresa Space X del visionario y millonario Elon Musk, es llegar a Marte en pocos años. En paralelo, el programa Starlink de Space X continúa a un ritmo endiablado enviando decenas de satélites todas las semanas. Un solo cohete Falcon 9 transporta 60 satélites. La aparición en el cielo nocturno de decenas de puntitos que se mueven como si fuesen trineos de Papa Noel puede ser divertido, pero corremos el riesgo de que en un par de años la noche esté cubierta de contaminación lumínica producida por los satélites de Starlink.
