No debe ser ni vejez, ni adulto mayor, ni tercera edad… debe ser considerado con otro nombre, como decía una amiga activista y feminista: “medianidad de la vida”. Muchos se preguntarán por qué, pues simple… de los 60 años en adelante es cuando con tranquilidad podemos dar todo lo aprendido y es cuando tenemos la cabeza bien puesta en la cabeza. Además, hoy por hoy el promedio de vida es mucho más alto, sobretodo en la mujer. Estoy en la medianidad de la vida y como madre, esposa y mujer voy a seguir adelante pues me siento orgullosa de la edad en que estoy.
Elena Hernáiz