La diablada de Píllaro
Son las fiestas de un pueblo ecuatoriano en donde se danza con caretas y traje de diablo. Esta danza en general representa la lucha entre el bien y el mal en la tradición cristiana pero no es así para la tradición indígena. Píllaro está a 40 minutos de Ambato y reúne a unas 80.000 personas visitantes.
Los inicios americanos se producen en Bolivia, al sur de Perú y en el norte de Chile en los tradicionales carnavales de Oruro (Bolivia), en la fiesta de la Candelaria (Perú), en la fiesta de Tirana (Chile) o el baile de diablos en Coban (Guatemala). Estas danzan tienen una antigüedad de 2000 años en Oruro (Bolivia) en donde se veneraba al dios Tiw por la civilización uru. Tiw era el dios creador y protector de la naturaleza (similar al Pan romano).
El el virreinato los indígenas se disfrazaban de diablos como queda claro en muchos escritos. En 1560 José de Acosta lo menciona en el Corpus Cristi de Cuzco. En 1590 se describe estas diabladas por Fray Martín de Murúa. En 1603 lo describe el jesuita Ludovico Bertonio. En 1608 Fray Diego González Holguín escribe sobre diablitos disfrazados. En 1616 los danzantes disfrazados de diablo debían realizar sus celebraciones frente al Santísimo Sacramento, frente a la Virgen María y en todas las fiestas católicas en Perú.
Las fiestas de Píllaro son diferentes y se celebran del 1 al 6 de enero. Fue reconocida como Patrimonio Cultural Intangible de Ecuador en el 2009. Comienza a las 12 del día y termina a las 18:00 horas. Pero a las 19:00 horas hay personas que se disfrazan de personajes públicos y se hacen teatros callejeros. En la gastronomía de esos días uno puede degustar fritada, hornado, trucha o pato al horno. Existen diferentes personajes en la diablada:
1º) Los diablos. Las máscaras de diablo están hechas con un molde de tierra a la que se le añade papel cuché. Posteriormente se le agregan los dientes y cuernos, generalmente de cabra y se pinta de negro y de rojo. La vestimenta es pantalón rojo, blusa y capa roja y medias rojas. Se dice que el que sale de diablo tiene que hacerlo durante 7 años ya que de lo contrario pueden ocurrirle cosas extrañas.
2º) Las guarichas. Son las indígenas solteras con bebés. Principalmente son hombres disfrazados de mujeres de dudosa reputación que ofrecen licor a los presentes.
3º) Los capariches. Personajes que barren las calles con sus escobas de ramas.
4º) Las parejas de línea: Van elegantemente disfrazados asemejando a los españoles y bailan pasodobles.
Es falso que los habitantes de Píllaro se disfrazaran de diablos en repudio a las prédicas sacerdotales, o al maltrato físico que recibían de los españoles. Si hubiera sido así estarían prohibido en la época colonial. Se cuenta también que un terrateniente español celebraba el año nuevo y sus siervos se disfrazaban de diablo para apropiarse del personaje odiado. Todas estas leyendas aparecieron con el proceso independentista y la república ecuatoriana. Todo lo que tuviera que ver con lo español tenía que ser repudiado.
Otra leyenda cuenta que los habitantes del barrio Marcos Espinel acudían a cortejar a las jóvenes de Tunguipamba. Los familiares se molestaban y en la noche comenzaron a disfrazarse con máscaras y cuernos para espantar a los pretendientes.
En la misma localidad el día de los Santos Inocentes (28 de diciembre) se le contaba a los niños de la localidad que salían por la noche el cíclope, el duende, la muerte, el alma, la caja ronca, el dos caras, la loca viuda, el uñaguile y el diablo. Hoy en las noches del 1 al 6 de enero salen estos personajes en comparsas.
Los diablos van acompañados de bandas musicales al son del sanjuanito y saltashpa. Y cada comunidad o barrio danza un día específico (Guanguibana, La Florida, Marcos Espinel, Rocafuerte, San Andrés, Santa Marianita, etc…).
Tenemos que tener presente que los diablos en la cosmovisión andina no tienen nada que ver con los diablos de la cosmovisión católica europea. Los diablos en Ecuador son seres graciosos y juguetones. Ellos mantienen las reglas y pueden beneficiarte o castigarte.
Las diabladas no son únicas en América sino también en España, por ejemplo en la localidad de Correfoc (Cataluña). Son, principalmente, tradiciones del siglo XII.